domingo, 30 de diciembre de 2012

Se acaba el 2012

Último fin de semana del año; momento habitual para reflexionar en como nos ha ido el año en todos los conceptos; esto nos hace ver que todo depende de hacia donde miremos. La inmensa mayoría, nos pilla que estamos demasiado preocupados mirando nuestra economía, y la economía global, y eso, al ser auténticamente malo, nos pone de muy mal humor, tanto que no nos deja ver que, además de la pésima economía, hay muchas cosas en el vida, y en mi caso, realmente y con sinceridad, no me puedo quejar. Aquí solo haré un balance de como me ha ido en mi huerto, que es una de las cosas que mejor me han ido; pero antes, y ya que estamos en las fechas de felicitaciones y todo eso, voy a poner dos fotografías preciosas del Belén que hay en Xátiva; que sirvan para desear a todos lo mejor para el próximo 2013; (por supuesto, que las fotografías tienen que ver, y mucho, con el contenido de este blog:


Haciendo balance de este año, repito que no me puedo quejar en absoluto; si lo hiciera, no sería justo con la naturaleza que tanto me ha ayudado. Es cierto que no empezó muy bien, pues el frío quemó por segundo año consecutivo el limonero, y además las habas; pero se recompusieron y aún comí bastantes. No comí nísperos, puesto que el frío también se los cargó, pero en cambio, los ciruelos si que fueron fantásticos, tanto de sabor como de tamaño y de cantidad. Respecto a las hortalizas de verano, comí tomates, calabacines y berenjenas hasta aburrirme. También un par de melones y las pruebas que hice con las sandías, al menos fueron divertidas. Probé una sandía que estaba bastante buena, y en vez de tirar las semillas, las planté directamente. Es cierto que solo me salió una de tamaño decente, pero al menos estaba muy buena. Las calabazas, es cierto que pocas u muy pequeñas, pero hablando con gente que también cultiva, simplemente debo decir que mi cosecha estaba en los parámetros normales o incluso en la zona buena estadísticamente hablando. La "tontería" que hice con las calabazas del peregrino, no pudo salirme mejor. Y los ajos, que todavía me quedan, ya ni lo cuento. Además conseguí limpiar todo el herbazal que tenía sustituyendo el hermoso huerto de naranjos que tenía mi padre. Todo ello, acompañado de una buena cosecha de aceitunas.
Así que, no todo me ha ido mal este año ¿no creéis?
Yo desde luego miraré el próximo año con optimismo, pues soy de los que creen que nos irá mucho mejor, y así os lo deseo a todos.
En cuanto a la rutina, la de todas las semanas, ahora no es precisamente la mejor época para la huerta: este frío, que está haciendo y que cubre todas las hierbas de una capa blanca, como si hubiera nevado, se está combinando con unas temperaturas que hacia mediodía te permiten ponerte al sol de manga corta, como en verano:
La calor, porque realmente son temperaturas de calor, están por un lado, impidiendo que las hortalizas de invierno, como las habas, fructifiquen, aunque, por fin esta semana ya vi la primera de la temporada:

Pero no solo son las habas lo que se está fastidiando; lo cierto es que no me fijé, pero anoche estuve hablando con Miguel, y me comentó que sus almendros ya presentan bastantes yemas, e incluso ya ha visto en algunos sitios, algunos almendros en flor; esto no es nada normal ni bueno, pero es lo que hay. Lo cierto es que estos árboles de fruto primaveral (almendros, albaricoques, ciruelos, cerezas, ...) que florecen con los primeros calores, años con temperaturas como éstas, los fastidian, puesto que el frio fuerte todavía está por llegar, y les pillará con la flor fuera.
Aunque de momento estoy limpiando los olivos de leña, el fin de semana  que viene, miraré a ver si tengo suerte y aún no me han brotado las yemas, porque tengo algunas ramas de los almendros y los ciruelos que es imprescindible cortarlas.
BUENO, PARA TODOS, Y CON MIS MEJORES DESEOS: FELIZ 2013.

lunes, 24 de diciembre de 2012

FELIZ NAVIDAD

Esta noche es nochebuena y mañana navidad... Así canta el villancico, así que lo que corresponde ahora es felicitaros las fiestas; de ello se encargan mis "carabasetes"....
Eso que vaya por delante, mis mejores deseos para todos. Y entrando ya en lo normal de la página, tengo que contar que no lo hice ayer, en contra de mi costumbre, porque ya estoy en navidad, y tuve una agradable visita familiar a casa. Por lo demás, el sábado fue normal, yendo (como no) por la mañana al huerto. Hizo un tiempo extraordinariamente bueno; tan bueno que me puse a preparar el terreno, y no me lo pensé, sembrando semillas de cebolla; en teoría, debería haberme esperado todavía unos quince días, ya que es mejor en cuarto menguante, y con el frío del enero, pero me pareció oportuno; eso si, con las bandadas de pájaros que iban por allí, no me atreví a dejarlo al descubierto, porque ya me ha pasado varias veces que se dedican a "limpiar" todo lo que se siembra más superficial; así que lo cubrí con una tela de rafia, para que deje entrar el aire y no se las coman:
Echando una ojeada, me llevé la agradable sorpresa de ver que todos los ajos que sembré hace tres semanas, ya están todos fuera, y con gran fuerza; este año, he sembrado los suficientes como para partir entre los tiernos y los secos; el año pasado lo hice por separado, y eso que no me fue nada mal, pero mejor todo a la vez:

Hoy, día de nochebuena, no tengo que acudir a mi puesto de trabajo, así que he dedicado esta mañana a algo que hacía un montón de tiempo que no podía hacer: ir al mercado; no voy a comprar, sino a ver, me encanta ver sobre todo las paradas de frutas y verduras; ese colorido único y especial tienen, esas formas de combinar los tamaños, formas y colores, que solo se puede ver en un mercado; y también para comparar, lo que hacen los demás; aquí en Valencia, en los  principales mercados se vende mayoritariamente de forma directa o casi directa del agricultor al consumidor, y eso me permite ver lo que yo hago, como me va resultando; esta hermosa col que recogí ayer:
no hubiera desentonado en absoluto en cualquier parada; también me he fijado en algo que me está mosqueando un poco; ya he comentado en varias ocasiones, que las habas las tengo preciosas, pero que no tengo ni un solo fruto; y no es por falta de flor:
Pero, esta mañana en el mercado, solo he visto en dos paradas, y muy poca cantidad; no se que está pasando con las habas esta año, pero creo que no es a mi solo a quien le pasa.
Y eso es todo, por ahora. De momento, en la televisión me han sorprendido con el programa "De temporada", especial de navidad (decían que ya no lo iban a hacer), así que voy a verlo.

FELICES FIESTAS A TOD@S

domingo, 16 de diciembre de 2012

Tras la cosecha, la poda

Eso es lo que me explicaron que era lo correcto, y así lo hago; cuando he acabado de recoger las aceitunas, es el momento más oportuno para quitar todo lo sobrante, ramas secas, ramas altas o difíciles de recoger, en fin, hacer una buena limpieza de todo aquello que se alimenta de la propia olivera  y no es productivo, o no es práctico. Esto produce que lo que se queda crezca, y lo haga en una forma más práctica para poder recogerlas fácilmente; hace dos temporadas lo hice, pero no me atreví a dar los hachazos correctos, y así me ha ido este año: aquellos árboles que le metí mas la sierra, este año tenían una multitud de brotes, productivos; por eso he tenido mucha más producción que en otros años; pero en cambio, no limpié esos retoños que salieron y me impidieron acercarme a muchas ramas de dentro del árbol, así que este año he empezado con menos "miedo". También es cierto que las aceitunas tienen un ciclo de años alternos, o sea, que haga lo que haga, el próximo año tendré mucha menos, así que lo haré cuanto antes, ya que lo he empezado.
Pero no solo es quitar ramas; también hace un par de meses planté una olivera, y ahora ya puedo decir, que creo que si ha cogido:
De todas formas, todavía tardará algunos añitos en dar frutos, pero siempre ilusiona eso de plantar un árbol. Bueno, a mí me encanta plantar lo que sea; también planté matas de alcachofas, pero de 10 que planté, solamente me han salido dos, y una de ellas mirad como es de pequeñaja:
Algo parecido sucede con las habas; éstas, en cambio, tienen un aspecto espectacular, pocas veces he visto un habar tan bonito,,, pero no tiene ni una sola vaina; mucha flor, pero nada de fruto:
Y cambiando de tema: con las lluvias de estos días, las hierbas han crecido una barbaridad; entre ellas, hay ortigas, de las que ya hablé hace algo de tiempo, y que por cierto, el insecticida que fabriqué según la descripción que puse, funciona. Pero además de las ortigas, me fijé en otra: en valenciano lo llamamos "llicsons"; Ricardo, me contó que eran muy sabrosos, especialmente en ensalada, y lo cierto es que tienen un gusto amargo, que a mí personalmente, me recuerda bastante al de la lechuga. Así que traté de averiguar algo más de esta planta; en castellano se llama cerraja, aunque tiene otros nombres, como pie rojo (por el color de la parte que une la hoja con el tronco); mucha gente la confunde con el diente de león, pero son distintas. Esta planta, sobre todo gusta mucho a los pájaros, y tiene una flor de color amarillo, que cuando se seca, vuela y a todos, sobre todo a los niños, nos encanta soplar para que vuele mas y mas lejos. Esta planta puede comerse cruda, en ensalada, o cocida como cualquier otra verdura. Como planta medicina, se puede emplear en emplastos sobre el estómago o sobre heridas infectadas con pus. Antiguamente, todas las farmacias tenían preparados de agua de cerraja. Tiene propiedades laxantes, diureticas, depurativas y digestivas. 
Las mejores hojas para ensalada, son las de la plantita pequeñita. Como veréis, no hay malas hierbas, sino, en el peor de los casos, hierbas improductivas.

domingo, 9 de diciembre de 2012

Recolección de las aceitunas

Buff, agotador; vaya tres días que he llevado, pero lo conseguí; he conseguido recoger todas las aceitunas; he pasado de doscientos kilos, cosa que dudaba, pero si, este año si que ha estado bien el tema, mucho más del doble que el año pasado; eso sí, a cambio, mucho trabajo y un agotamiento tremendo, pero feliz. 
No he hecho muchas fotografías, en contra de mi costumbre, y por eso, empiezo esta entrada en el blog con la fotografía de una preciosa olivera, no es mía, pero me encanta: (también esté en otra parte de este blog, pero aquí cabe como anillo al dedo:
Y es que el olivo es un árbol que está acompañando al hombre prácticamente desde que está sobre la tierra; el sabroso aceite siempre ha servido como acompañamiento para comidas, y como un excelente lubricante para otras necesidades. Las distintas religiones lo han mitificado y su longevidad, no hace sino acrecentar su leyenda; esta que aparece en la fotografía, he de procurar enterarme de cuantos años tendrá, pero yo estoy convencido de que tendrá más de trescientos, que se dice pronto. Las mías, según me han dicho gente que entiende, tienen entre 100 y 125 años; yo solo puedo certificar que tienen algo mas de medio siglo, porque las recuerdo incluso cuando tenía menos de tres años; algunos de los recuerdos míos de esa época, ya los tienen en la imagen.
A lo que ibamos, que me estoy enrollando; llegué el jueves, para aprovechar el puente festivo, y a primerísima hora extendí las telas y a la marcha, a tirarlas lo más rápido que pude:
Lo cierto es que han sido unos días con una climatología extraordinaria, una temperatura fresca, pero sin agobiar, solecito a media mañana que templaba perfectamente el ambiente; así da gusto hacer tareas al aire libre. Finalmente las cargaba en el coche, y a la almácera, para que se conviertan en rico aceite.
Nunca me había parado a pensar en la variedad de colores de las aceitunas; siempre me habían parecido verdes o negras. Sin embargo, las manzanillas, cambian progresivamente del verde a un verde azulado, luego a un morado y finalmente al negro; las blanquillas, pasan primero del verde a un tono amarillento, que va enrojeciendo pasando por un rojo fucsia precioso que cambia al morado y finalmente al negro.
Cuando llegué a la almácera, habían como unos veinte vehículos delante de mi; furgonetas, camionetas, coches con remolque, y turismos como el mío, con unos pocos capazos; y es que en esta zona al menos, la gente cultiva las aceitunas, por estos días; gente como Miguel, que van a recogerlas en uno o dos fines de semana, que se junta toda la familia, y con la excusa se preparan unas parrilladas excelentes, o Juan, que me lo he encontrado esta mañana, y en vez de las mantas, ya estaba cargando en la furgoneta un capazo con lo que iba a ser el almuerzo.
De hecho, hay incluso poblaciones que celebran fiestas; me comentaba Sole (desde Toledo) que en su pueblo celebran la fiesta del olivo; como lee esto, espero que se anime por fin, y me envíe alguna fotografía.

lunes, 3 de diciembre de 2012

Hablando del tiempo

Si es que no hay más remedio que hablar del tiempo. Después de un verano extremadamente caluroso y seco, hace nada, en el mes de octubre, estábamos sufriendo un calor realmente insoportable. En noviembre, prácticamente todos los días lluviendo, el sol solamente venía, nos saludaba y desaparecía tras las nubes. Y ahora, entramos en diciembre, y un frío más propio de enero que de estas fechas; de hecho, cuando me planté el sábado en el huerto, estábamos a cero grados. Así no hay manera de que las plantas lleven una vida más o menos estable. Pero es lo que hay; de hecho toda la vida los labradores han mirado más al cielo que al suelo.
Evidentemente, hay que aprovechar, y como ya era el ciclo menguante de la luna, había que sembrar los ajos; según manda la tradición, se han de plantar en el último ciclo menguante de la luna antes de las navidades. Y eso hice; pero esta vez llevé cuidado de sembrarlos como toca, es decir, plantaditos con la  parte que era la raicilla debajo y la zona por donde sale el ojo hacia arriba:
Ahora no es una época en la que haya mucha variedad de tareas a realizar en la huerta, al menos, conforme la tengo enfocada yo. Es cierto que nunca se puede parar, y siempre hay tareas que hacer, pero en mi caso, ahora toca ya prepararme para este fin de semana recoger ya las aceitunas. De hecho, ya he recogido unas cuantas que las lluvias y el viento de estos días atrás, me habían tirado al suelo. Pero las lluvias también tienen algunas curiosidades; tengo el suelo del huerto minadito de toda clase de setas:
Esta foto, la he puesto porque parece que a la foto que hice hace justo un año (ver entrada) en vez de pasar los 365 días, haya pasado solo una semanita. También formas curiosas de presentarse: estas estaban todas en línea recta, excepto la negra:
Y eso es todo lo que os cuento hoy; ahora, a esperar que al menos haga buen tiempo y no llueva el próximo fin de semana y pueda recoger las aceitunas sin problemas

domingo, 25 de noviembre de 2012

No puedo descuidarme nada

La verdad es que con la excusa del mal tiempo, no estaba haciendo mucho trabajo en la huerta; a ello, hay que añadir que esta semana tenía la intención de hacer "novillos"; de hecho, el sábado, que es cuando voy siempre, me dediqué a buscar setas; me levanté a la hora acostumbrada, pero en vez de coger el coche e ir al huerto, que es lo habitual,cogí los guantes, me metí una navajita en el bolsillo, cogí una cesta, me abrigué bien, y al monte. Las apariencias, esas que siempre nos engañan, me hicieron mucha ilusión. Al poco rato de estar por allí ya había visto bastantes. Digo visto, porque eso fue, verlos, ya que con las lluvias que no han cesado, estaban totalmente podridos; de hecho solo conseguí llenar media cesta, y con aprensión, ya que estaban bastante estropeados. Eso sí, disfruté de un fantástico almuerzo en plena sierra (por cierto, casi que me senté encima de los dos mejores que encontré en toda la mañana), y unas vistas espectaculares:
Y también sitios curiosos, como este manantial:
La verdad es que cogí unos cuantos a pesar de que solo cojo los rebollones (esclatasancs, o pebraços), pero como esta semana precisamente estuve hablando con un compañero que pertenece a un club micologíco, de una seta que era "pie violeta"; la que me mostró él, no se parecía en nada a las fotografías que vi de la misma en internet; en cambio, si que se parece bastante a esta:

Pero no puedo estar un fin de semana sin acercarme a mi huertecito; y menos mal que fui, porque me di cuenta de que algunas faenas, por mucho que quieras se tienen que hacer a su debido tiempo, como es recoger las aceitunas: así están las ramas:
y así estaba el suelo:
Así que ya me tenéis, doblando el lomo y en cuclillas para recogerlas; un capazo lleno (entre 18/20 kg., mas o menos). Y menos mal, porque si no, a la semana que viene ya están todas perdidas. Y como no, también (pero estas solo las fotografié) ... Setas:

Es cierto que cada vez me gusta más el mundo de las setas, pero eso solo es un par de meses en otoño, así que seguimos en contacto por la huerta

domingo, 18 de noviembre de 2012

colores otoñales

El otoño presenta siempre una luminosidad y unos colores muy característicos; el gris del cielo que anuncia un día húmedo y lluvioso, combinado con el ocre que presentan las hojas a punto de caer, junto al verde de la hierba, favorecida por este ambiente, forman una paleta de colores difícil de ver en otras épocas.
Claro que esos colores no son lo único que cambia en el otoño; una cosa muy característica del otoño son las setas y hongos que aparecen por doquier; extraordinaria la enorme variedad de aspectos y colores que presentan; aquí, en mi huerto, parece que los tenga sembrados:
Lo cierto es que no se si estos son comestibles o no; por si acaso las he dejado que sigan su ciclo natural. Estas setas me han aparecido junto a las cebollas, 
Aunque lo cierto es que estas cebollas, y una fantástica col, ya las he recogido, y de hecho ahora cuando estoy escribiendo esto, la col ya nos la hemos comido, y por supuesto, en las ensaladas ya vamos añadiendo las cebollas.
Es muy curioso, de las cuatro coles que planté, solo ésta ha llegado a buen término, al menos de momento, ya que las restantes, están como si dijesemos "hibernando", ya que no van en ningún sentido, ni crecen, ni se estropean, allí están, quietecitas. Lo que ya está menguando son las berenjenas; aún cogi unas cuantas, pero ya eran muy pequeñas, y por lo que se ve, pocas esperanzas de que continúen adelante; es ley de vida, se acabó su ciclo.
Sin embargo, en el otro lado están los nísperos, que están preciosos de flor, 
y sobre todo las habas; en la fotografía se puede apreciar la diferencia de un mes entre las dos tandas:
Y así es el otoño en la huerta; a mí, particularmente, me encanta pasar días con este aspecto en el huerto; pese a que aquí siempre hay cosas que hacer, lo cierto es que los disfruto y mucho.


domingo, 11 de noviembre de 2012

El Plan "B"

Lo cierto es que hay días que tener un plan "B", por si no puedes hacer lo que tienes previsto, no es suficiente, sino que ha que tener un plan "C", "D".... y así todo el alfabeto. Eso es lo que me ha sucedido este fin de semana. Empezamos porque no me sonó el despertador, y no veas lo feliz que estaba durmiendo, hasta que el perro no podía mas y me despertó.
Luego, me dí cuenta de que había llovido durante la noche, y mi "yo vago" no paraba de decirme que no fuera a la huerta, ¿para que? todo estaría mojado y no podría hacer nada. No le hice caso, porque se que allí siempre tengo cosas que hacer, esté mojado o esté seco; podría limpiar un poco la nave, entre otras cosas; cuando llegué vi que unos montones de hierba seca que la semana pasada no acabaron de quemarse, estaban prácticamente igual. Cogí la azada y descubrí que se había quemado por dentro, de una forma muy curiosa, y que la parte inferior, estaba totalmente podrida. Una combinación  de hierba podrida, ceniza y tierra, o lo que es lo mismo, un compost de primerísima calidad. 
Evidentemente, ya me salió el trabajo urgente que tenía que hacer: con un capazo comencé a escamparlos por todo el terreno; mientras tanto, comenzó a aparecer el sol; claro que, con el día que llevaba ... Con ese sol y un poco de buena vista, podría sacar unas fotografías del huerto en otoño... y por supuesto que no pude, ya que se me había descargado la batería!!!!.
En fin, no puedo poner fotografías hoy, pero bueno, no hay otro motivo para lamentarse. Siguiendo con lo que hice, finalmente conseguí escamparlo todo y a esperar que llueva; si llueve, irá filtrándose todo ese compost y abonará la tierra. Eso sí, además de esas y otras cositas que me sucedieron, llevé un día de cambios contínuos de planes, pero eso es otra historia. Espero que la semana que viene pueda poner algunas fotografías de lo bonitos que son los colores del otoño. 

domingo, 4 de noviembre de 2012

Ya pasó el Halloween

Eso de que el Halloween haya caído en medio de semana, a pesar de que el jueves fue festivo, no me ha dejado desearos una feliz noche de difuntos, pero espero que os lo hayáis pasado muy bien; mis calabacitas (tengo la costumbre de guardar siempre la benjamina de la cosecha) si que os lo desean, aunque sea un poco tarde:
Desde luego, ellas si que lo celebraron, a su manera. Esta fecha ya indica que pese a que oficialmente estamos en otoño, en realidad ya empezamos a pensar en el invierno. Y hablando de invierno, los nísperos florecen ahora; no me había fijado hasta el año pasado, pero es curioso; cualquier otra fruta de principios de verano (ciruelos, cerezas, etc), comienzan su floración con los primeros calores primaverales, aunque algunas veces estos calores se produzcan en enero, con el consiguiente riesgo de heladas, pero los nísperos florecen ahora en invierno; es cierto que no es una flor muy bonita a la vista, pero ello es debido al cáliz de la flor, que la protege del frío.
También es época de recolección: este verano se me ocurrió plantar para probar un par de matas de boniato (por cierto, no sabía como se escribía y resulta que se puede llamar boniato, moniato, batata, bataca, patata dulce, patata de Málaga, minina, o chaco); técnicamente se llama Iponea Batatas, pero no creo que ese nombre sea muy usado. Por cierto riquísima en vitaminas A (betacaroteno), C (ácido ascórbico) y E (tocoferol); en realidad lo planté porque me gustan mucho asados y sobre todo los pastelitos de boniato; no es que fuera una gran producción, pero ahí queda:
Pues eso he hecho; además de recolectar los boniatos y preparar el terreno desbrozándolo para poder recoger las olivas, he limpiado terreno pensando ya en lo que tengo que ir plantando la próxima primavera; cuanto más trozo de terreno tenga preparado, más podré hacer. Pero en algunos fines de semana, no solo me lo paso bien en la huerta; tal y como me imaginaba, estas combinaciones de lluvia y días de calorcillo, han traído la estrella del otoño, las setas:
Este es el primero de la temporada, no era muy grande, pero junto con otros, ayer tuvimos un estupendo primer plato para cenar.

domingo, 28 de octubre de 2012

Y hoy cambian la hora

Hoy cambian la hora; he de confesar que soy de los que consideraban esto una estupidez de grado máximo, pero, como todo en la vida, hay que mirar por muchos lados; ayer sábado, con el horario de verano, a las 7:45 de la mañana estaba ya en el huerto, porque he estado dos semanas sin hacer nada en la huerta, y queras que no, se van acumulado. Pero, con el horario anterior, llegué de noche cerrada y tuve que esperarme casi media hora para poder ver donde tenía la ropa para cambiarme. Hoy, domingo, con el nuevo horario, me he despertado a las 7:30 del nuevo horario, y ya había luz. Este pequeño detalle ha hecho que me replantee eso de que es una estupidez. 
En fin, cambiamos de acto y bajamos el telón con la fotografía de una flor, que no se lo que es, pero me gustó muchísimo; por supuesto es de un árbol de mi huerto, de esos que me han aparecido debajo del famoso zarzal. Si alguien sabe qué es, que me lo diga, por favor.
Pues bien, a pesar del madrugón, y de la espera, resulta que a mediados de semana, también lluvió, con lo que el suelo estaba muy tierno y húmedo, así que no pude hacer muchas cosas. Pero no podía dejar pasar otro día; las matas de habas, que estaban preciosas, no se veían, ya que la hierba era mucho más alta que ellas, así que me puse a limpiar el terreno:
Acabé cansado, pero como se puede apreciar, valió la pena; eso sí, para hacer esto y que no me pase lo que le pasó a mi amigo Pepe, hay que ir con mucho cuidado; la raíz de las habas es muy superficial, y a poco que se te vaya la mano, te las cargas arrancándolas, cortándolas o simplemente cortándoles las raíces. Con la rascadora hice el surco entre los caballones, y entre mata y mata las arranqué a mano. Como se ve en la fotografía, las que planté hace poco tiempo (son las que están un poco más alejadas), ya han salido prácticamente todas, mientras que las que planté primero ya están empezando a sacar flor:
Así que en poco tiempo a comer habas. Pero estas lluvias, no solo han hecho crecer las hierbas, sino que han sido fantásticas para todo: las aceitunas se han hecho el doble de gordas, y las cebollas, no hay mas que verlo:
Y, ya que estamos en temporada, y pese a que estos creo que no son comestibles, los fotografío, porque al fin y al cabo, los encuentro en mi huerto:


Sin embargo, me fuí a la sierra a ver si encontraba alguno, pero allí ni asomo de nada bueno; pero eso es cuestión de tiempo, ya que la climatología ha sido la ideal. Ya os contaré

domingo, 21 de octubre de 2012

Fin de semana y lluvia

Recuerdo la película de Berlanga, "los jueves milagro"; pues bien ahora parece que "los sábados lluvia". Y anda que este sábado no ha caído nada. Pude acercarme un poco el viernes pero solo para mirar, no pude hacer nada. Estaba amenazando ya la que iba a caer, y recogí un poco de lo que había, que a estas alturas ya no es mucho: un par de calabacines, tres tomates y tres berenjenas; las berenjenas, este año, si que me están cundiendo:
Como puede verse en la fotografía, todavía hay muchas y además mucha flor que promete más fruto. También por fin, me han salido los cardos, pero solo 3 matas de 10 que planté:
Pude ver que las habas que sembré hace un par de semanas, ya asomaban y se unían a sus compañeras que ya tienen mes y medio aproximadamente; así que en breve, a comer habas.
Podría excusarme en que no he hecho nada en el huerto para no escribir, pero eso me parecería una falta de respeto hacia los que me seguís en el blog, por lo que estuve recordando una conversación con Miguel, en la cual me dijo que las berenjenas crudas eran tóxicas. Evidentemente, me lo creí, puesto que no suelo poner en duda lo que se que me dicen de buena fe, pero decidí enterarme de qué había de cierto en ello.
Efectivamente, la berenjena es una planta de la familia de las solanacéas, a las que pertenecen las patatas, la belladona, la misteriosa "mandrágora", o el tabaco, y contiene un alcaloide, la solasonina, cuando no está bien madura. Aunque la mayoría del alcaloide, está en las hojas, no es conveniente que las personas con problemas cardíacos las consuman; en cualquier caso, sus efectos se atenúan con la cocción, aunque no llegan a desaparecer del todo. Es decir, que incluso cocinada podría ser tóxica; lo que ya no me atrevo a decir es que sean venenosas, y la prueba de que no lo son, es que estoy escribiendo esto (y si que he comido patatas crudas, aunque no he comido berenjenas crudas).
En cambio, si que tienen unos efectos positivos en cuanto a sus propiedades medicinales muy dignos de destacar: 
Mejoran la circulación, ayudando a reducir el colesterol y previniendo la arterioesclerosis. Resulta muy útil el comerla después de una comida abundante en grasas, ya que sirve de desengrasante y no permite que los ácidos grasos saturados se depositen en las arterias, expulsándolos por los intenstinos. También estimula la bilis, ayudando al hígado a disolver las grasas.
La pasta resultante de machacar la pulpa de la berenjena, suaviza las quemaduras, especialmente las quemaduras solares... (se puede uno poner "gamba" en la playa y luego, se reboza con berenjena, y como nuevo); esta pasta, también ayuda a calmar los dolores reumáticos.
Por su alto contenido en agua y su bajo contenido calórico, es excepcionalmente buena en dietas de adelgazamiento, aportando minerales como fósforo o hierro, junto con potasio, calcio y sodio. Sin embargo, en comparación con otras verduras su aporte vitamínico es muy pobre. Parece ser que su consumo inhibe el crecimiento de células cancerígenas en el estómago, lo que aunque en animales si que se ha comprobado, todavía no se puede demostrar que funcione para los humanos.
No quiero enrollarme más, y en Internet hay sobreabundancia de información de este tema, así que os recomiendo unas tiras de berenjena a la plancha, con un pelín de sal... y nada más. (creo que cenaré eso esta noche).

domingo, 14 de octubre de 2012

Aceitunas, hongos y ... espárragos

Ya estamos casi en la época de recogida de la aceituna; no hay más que ver como están ya los olivos:
Este año, si no sucede como el año pasado, que unos días de aire echaron por los suelos prácticamente todas las aceitunas, voy a recoger bastantes; de hecho ya he recogido unas cuantas, de las manzanillas, para adobarlas y comerlas: con capazo de esparto, quedan muy fotogénicas:
Y por si no tenía bastantes, mi amigo Ricardo me ha regalado una de la variedad "picual", que ya la he plantado:
Pero no solo de aceitunas voy a hablar hoy; las calabazas del peregrino, las tenía que poner a secar, y ¿que mejor sitio que un antiguo secadero de tabaco?; así, colgadas de los alambres del techo seguro que se secan de la mejor manera:
Claro que el título parece que lo haya puesto para despistar; pues si, tan despistado como lo está este tiempo. El viernes por la tarde cayó una buena, como hace un par de semanas, pero seguimos con un calor anormal, lo que produce cosas muy curiosas: de momento, ya ha vuelto el poblado de David el Gnomo:
Así como otras setas que no tengo ni la más remota idea de qué son, pero que quedan muy bonitas:
Estas imágenes son el anuncio de que en la sierra ya estarán casi a punto para recoger los rebollones (níscalos, esclatasangs, pebraços,,, como se quieran llamar).
Lo de despistar, es muy fuerte, porque esta mañana me he acercado al huerto (había oido que pedregó), y he aprovechado para recoger un par de berenjenas, un calabacín, ... y un montón de esparragos; las berenjenas, es mas o menos normal, lo del calabacín ya es mas raro, pero bueno, a veces las plantas duran más de lo habitual, pero ¿espárragos en octubre?, ¿y tantos?:
De los calabacines, ya que este año han sido tantos y tan buenos, he separado semillas, y las he puesto a secar.
Bueno, esto es lo que tengo que contar; todo más o menos sigue normal, excepto las rarezas del tiempo; al final, eso del cambio climático nos va a fastidiar mucho más de lo que esperamos.