domingo, 28 de diciembre de 2014

Acabó el 2014

Pues sí, ya se ha acabado el 2014 para La Carabasera. Hasta el próximo año no voy a poder volver al huerto, así que aprovecho para desearos un FELIZ Y PROSPERO 2015 para todos. La semana pasada se me pasó felicitaros las navidades, así que, como todavía estamos a tiempo, aunque con retraso, FELIZ NAVIDAD.
Y para estas navidades, el huerto si que me ha dado un buen regalito: por fin conseguí que las romanescu llegaran a aparecer; todavía son pequeñas, pero ya tengo 4:
Son preciosas, me encanta esa forma tan curiosa, y tan apropiada para estas fechas navideñas; pronto estarán ya listas para cogerlas. Es curioso pero parece que cuando se te cruza algo, no hay forma, pero si realmente quieres algo, finalmente lo consigues.
Lo que me preocupa realmente cuando llegan estas fechas es el limonero; tres veces se ha quemado por el frío, y otras tres se ha recuperado; este año si que he comido limones pero lo veo como apagado, y débil, y ahora en enero, que las heladas van a ser continuas, estará realmente en peligro:
Y es que este año, ha sido muy raro en cuanto al clima; pese a que prácticamente no ha hecho frío todavía, lo cual ha repercutido sobre todo en el tipo de hierbas que han salido, cosa que se puede observar en la práctica ausencia de ortigas:
Además de poco frío y extremadamente seco, ya que no ha llovido casi nada, estos días ya hemos sufrido heladas, debidas a unos días que se ha bajado de cero grados y que además sin llover, han cubierto el suelo de una espesa y densa niebla, que ha dejado el suelo como si hubiera llovido o nevado:
Ahora bien, la naturaleza es siempre activa y tiene sus "curritos" que se encargan de ayudarla, como esta abeja, que está polinizando las flores de los nísperos.
Y ahora, a esperar al 2015. 

domingo, 21 de diciembre de 2014

La naturaleza, siempre enseña

No es muy frecuente, pero hacía dos semanas que no iba al huerto; la semana pasada no pude ir por motivos personales, y conforme está el tiempo, no tenía muy claro si iba a encontrarlo normal, o totalmente cubierto por las hierbas nuevamente; y es que a las lluvias de hace unos días, se ha añadido una climatología muy húmeda, con nieblas nocturnas cuyo efecto mas llamativo era que por las mañanas parecía que había diluviado, con todo el terreno embarrado. 
En estas circunstancias, y en época de "huertiing3<extremo, que estoy ahora, ya que la tarea más urgente que tengo ahora es limpiar el terreno de hierbas, y sobre todo de la grama; la grama es una hierba muy invasiva y difícil de luchar contra ella, La única forma es cavar  con la azada para ir descubriendo sus raíces e ir arrancándolas. Un trabajo agotador y que además parece que no cunda, pero que si que tiene una recompensa y es que el trozo que se limpia, permite que durante una buena temporada desaparezca de la vista.
Pero claro, con la humedad y el barrizal en que se convierte el terreno, tengo que esperar a que se seque algo el terreno para poder hacer algo, y así, cunde muy poco; 
La humedad se aprecia perfectamente en esta telaraña:

Siempre me han fascinado las arañas y su forma de cazar; también es muy llamativo como atrapan el agua las telarañas, más que muchas otras cosas; de hecho, esto ha servido de inspiración para poder recoger el agua en aquellos sitios donde no hay o hay muy poca. Hace tiempo que oí un reportaje sobre como recogían el agua de las nubes en las zonas altas de las Islas Canarias. El sistema es casi idéntico al que humildemente nos muestra la araña, y consiste en algo tan sencillo como una red muy tupida, de un material similar a la seda; el agua de las nubes queda atrapada del mismo modo que se ha quedado en esta telaraña y condensarse, se recoge en una red de canales hasta llegar a un depósito donde se va acumulado. Y es que la naturaleza siempre nos está enseñando cosas.
Ya puedo decir que ha finalizado la temporada de verano,; aproveché  el tiempo para arrancar las matas de pimientos y berenjenas; el frío no las trata muy bien, y ya las había secado. Aunque las pocas berenjenas que quedaban solo servían para ponerlas en adobo, si quedó alguna de tamaño decente, para dejar constancia de la última de la temporada:

Otras cosas que si que están funcionando son las coles, que ya empiezan a florecer, el hinojo, que luce como nunca, e incluso las lechugas;:


No suelo tener muy buena suerte con las lechugas; ya que normalmente no se porqué razón no consigo que lleguen a buen término y  cuando lo consigo, no tienen tamaña, pero en esta ocasión  he conseguido algo decentitillo.
Y para acabar por hoy he fotografiado el níspero, totalmente lleno de flor; si enero no lo fastidia, este año va a ser muy bueno<.

lunes, 8 de diciembre de 2014

De dos dias

Este fin de semana largo, me ha permitido ir dos dias al huerto. Teniendo en cuenta que últimamente no puedo ir todas las horas que iba habitualmente, no ha estado nada mal. Dos días con una característica común, el primer frío serio de la temporada; el sábado, 4 grados y hoy lunes, 0. La principal diferencia, ha sido lo que me he encontrado al llegar; hoy  me he encontrado con esto:
Menuda helada! solo de mirar como estaba todo me ha entrado un frío increíble; sin embargo, el sábado pese al frío que tampoco estaba mal, fue distinto; lo primero que me encontré fue que ya tenía una alcachofa lista para recoger, la primera de la temporada, y varias en camino:
Ahora es tiempo de ir preparando el terreno, para los ajos, que pretendo sembrar dentro de dos semanas, y las patatas, que tocan en enero.; de momento, está todo un herbazal, pero cuando cojo la azada y me pongo, lo dejo muy limpito:
Y claro al estar limpio el terreno, se ven perfectamente tanto el níspero como la higuera bonsai, que por cierto, ya no es tan bonsai:

Pero a pesar de la apariencia tan limpia, no es cierto que esté listo; el trozo este que tengo previsto para los ajos, estaba totalmente lleno de grama, y solo hay una manera de luchar contra ella y es arrancándola de raíz, y esto es muy duro, ya que hay que ir cavando por lo menos meterte hasta los 40 cms de hondo y raicilla por raicilla, ir arrancándolas todas<<, y en eso estoy ahora.
Pero no todo es dureza: el almuerzo, siempre lo acabo con frutas y este fin de semana han tocado las granadas: por fuera, con la piel requemada por el sol y cuarteada,
pero una vez abiertas, unos granos con un color rojo intenso, que al ponerlos en la boca, revientan y te llenan de sabor, una maravilla....