Cambio de hora

Como siempre, el último fin de semana de octubre, nos ponen el horario de invierno. Pese a que hay una cosa que es cierta, ya que a todos más o menos nos cuesta habituarnos a esta hora que ahora se recupera, no a todos nos parece igual y cada uno opinamos conforme nos va. Dicen los expertos que así se ahorra mucho dinero; no lo se, pero a mi me parece que no, ya que la mayoría de trabajos de hoy en día se afrontan tanto de día como de noche con luz artificial, por lo que no veo que se ahorre mucho en ese sentido; sin embargo, por lo que a mi respecta, estoy absolutamente de acuerdo con estos cambios de horario, y me explico. Ayer sábado, llegué al huerto aproximadamente a las 8 de la mañana; oscuridad total y absoluta y tuve que hacer un rato de tiempo antes de poder empezar a hacer algo; sin embargo, a partir de hoy, a esa hora ya hay mas que suficiente luz natural para poder trabajar. Es cierto que a partir de las seis de la tarde ya no existe prácticamente esa luz, pero por la tarde no es habitual ir al huerto. En cambio, en verano, al amanecer mucho tiempo antes, se puede retrasar la hora por la mañana y aprovecharse por la tarde. En fin, nos guste o no nos guste, es lo que hay.

Pero este blog lo tengo para contar lo que hago en la huerta, y eso es lo que voy a hacer; esta semana he arrancado ya las tomateras; no me hacía gracia, puesto que habían muchos tomates todavía en las matas:

El problema no era la cantidad de tomates, sino que con este clima ya no llegan a madurar correctamente; sin embargo, he conseguido una buena cantidad para ponerlos en salmuera, que también están muy buenos. No tengo muchas esperanzas respecto a los que planté hace poco, pero creo que debo concederles un margen para ver que sucede con ellas.

En cambio, las habas si que parece que van adelante, ya que tienen mucha flor aunque muy poca hoja y poco tamaño; a ver que sucede porque los últimos años era lo contrario y apenas comí habas.

Lo que ahora tengo bastante es de hierbas silvestres; lo que desconocía yo es que la borraja en otras zonas de España se cultiva ya que hasta hace nada la arrancaba; sin embargo, ahora que ya la he probado y me gusta, la cuido como si la cultivara:

y para finalizar por hoy, pongo esta fotografía de un ciruelo, que ya ha empezado a tomar el color del otoño:

Llega el otoño, todo cambia

Por fin tenemos una estación en la que el clima está haciendo lo que toca; mezclar días de calor veraniego con otros de fresquito sin pasarse, días grises y lluviosos alternando con otros radiantes de luz y sol; estamos en el otoño, que al igual que en la primavera produce un gran cambio en el paisaje; aparte de los cambios de colores en los árboles, que empiezan a perder las hojas, los cambios más notorios están en las flores; podemos comenzar por hablar de las flores comestibles como son las alcachofas:

Ya empiezan a mostrarse, y en muy poco tiempo empezaré a recoger algunas; tengo pocas matas, pero este año espero que sean bastante productivas; de hecho, el año pasado ya lo fueron y este, tienen mucho mejor aspecto.

Otra flor de invierno que ya empieza a mostrarse es la del níspero:

Empiezan ahora a abrirse poco a poco; esta flor no es muy bonita precisamente, pero aguanta muy bien los rigores del invierno, de manera que hasta que la primavera no está bastante avanzada, no se convierten en frutos.

Aunque para mi gusto, en un huerto, la flor estrella es la de las habas:

Llevo una racha con las habas impresionantemente negativa: hay años que no cuajan las flores, otros, como me sucedió el año pasado, aparecieron por allí los ratones y alguna que otra "ratita de dos patitas" y apenas las pude probar. Espero que este año sea normal, ya que con lo que me ha costado de limpiar de hierbas las matas de las habas, no me sentaría nada bien.

También es tiempo de cosechas: de maíz y de calabazas:

Aunque creo que el maíz no está todavía listo, y las calabazas de asar ya conté la semana pasada mi problema con ellas, por lo menos estas divertidas calabacitas tricolores si que han sido productivas, y realmente quedan muy decorativas.

Aunque ya voy a quitar las tomateras, puesto que no llegan a madurar correctamente ya los tomates, estas que planté a última hora, parece que quieren ir hacia arriba:

Solo puedo concederles un margen de confianza, aunque no se si llegarán a producir ya que la idea se me ocurrió demasiado tarde; tal vez un mes antes hubiera conseguido algo, pero ahora tengo mis razonables dudas.

Y claro, limpiando las hierbas por donde tengo plantadas las fresas(este año tengo la sensación de que no hago otra cosa), arranqué sin querer unos brotes de nuevas matas de fresas. y los planté en unas macetas a ver que sucede.

 es muy curiosa la forma de reproducción que tienen, ya que la planta saca una especie de varita bastante larga, que cuando toca el suelo, empieza a sacar unas raíces y a continuación las hojas, con lo que se ha creado una nueva planta y la varita, continua su marcha, creando nuevas plantas.

Contra pronóstico, si que tengo calabazas

Pues si, contra todo pronóstico. Cuando este verano intenté sembrar las calabazas, no había manera de que salieran las plantas, y las pocas que salían lo hacían sin fuerza quedándose con las hojas muy pequeñas, y muy cortas; sin embargo, probando en otros sitios, e insistiendo, conseguí que algunas plantas funcionaran; de hecho, aunque esta es la más grande que he conseguido esta temporada:

hay al menos tres más que en unos cuantos días estarán disponibles para recoger; eso si, de las calabacitas de adorno que planté, solo salió bien una mata, pero, menuda mata; está repleta de mini-calabacitas de colorines; la semana que viene pondré fotografías de ellas. 

Sigo limpiando hierbas y eliminando la grama; esto último es una tarea tediosa y agotadora, ya que solo se puede ir arrancando las raices, y eso de cavar con la azada como mínimo a unos 30 cms de la superficie, y a cada golpe de azada, agacharse y recoger las raíces que van apareciendo, es lo que llega a cansarte físicamente de verdad; además, parece que no adelantas nada. Lo positivo es que por donde se realiza esta tarea, se está durante unos añitos sin que esta hierba tape todo lo que tienes plantado; de hecho, la hierbabuena que tengo, que también es una planta invasiva, está como atemorizada y la detecto más por el olfato que por la vista.

También voy limpiando de hierbas unos pequeños olivos, que ya no son tan pequeños, y que este año están bastante cargados de aceitunas; es una tarea menos tediosa y agotadora que la grama, pero no por ello cómoda; eso si, bastante más agradecida porque el aspecto cambia mucho cuando has conseguido limpiar un trozo:

Y mientras intento quitar las hierbas, la naturaleza sigue a su ritmo, sin importarle lo más mínimo si yo me esfuerzo o si paso de ello; así que ya he empezado a coger granadas,

las habas que sembré en su momento ya van cogiendo tamaño:

y en breve, podré comer palomitas de maíz:

Y si la naturaleza va a su "bola", ir contra ella, es un poco absurdo; de hecho, ahora que estamos en otoño, y pese a que sigue haciendo calor, los tomates reconocen que ya no están en verano y si ya han salido, no hay forma de que maduren...

y si se han plantado finalizando ya el verano, las matas no crecen ni a empujones:

En cualquier caso, ahora ya tengo que ir preparando el suelo para la recogida de la aceituna, que ya tardará poco; esta vez, solo serán cuatro hierbajos porque en su momento si que hice bien lo que tenía que hacer, que es cortarla bien a final del verano. Y cuando tenga algo de terreno limpio de grama, comenzar a sembrar cosas de invierno; este año, llevo idea de plantar guisantes, zanahorias, y más habas, pero como suele suceder una cosa es lo que pienso, y otra lo que me deja hacer el terreno.