lunes, 30 de noviembre de 2015

Toca recoger aceitunas

Llegó la hora de recoger las aceitunas; este año las previsiones no podían ser mejores, y se han cumplido perfectamente, ya que he superado con creces lo recogido el año anterior. Una cosa que no tiene nada que ver con la agricultura, pero que me llama la atención es el nombre: ¿aceitunas u olivas?; tengo entendido que la expresión "recoger olivas" solo se utiliza en la zona de Valencia, mientras que en el resto de España son "aceitunas", y no utilizan el nombre de "olivas" para referirse al fruto del olivo del cual se saca el "aceite de oliva".
Hecho este comentario, ya paso a relatar que me he pasado unos cuantos días recogiendo las aceitunas (utilizo ahora el término más conocido en el resto de España), lo cual físicamente me ha dejado algo cansado, ya que las recojo yo solo, sin ayuda, y sin herramientas. Hay varias formas de recogerlas; hablando hace poco con un conocido, me comentó que el tenía unos cuantos centenares de árboles, pero que con una mañana tenía suficiente, ya que iba con un tractor que llevaba una especie de "alas de mariposa" que rodeaban el árbol, y con un par de sacudidas, todas las aceitunas caían en estas alas con lo cual, ya estaba recogido
Ahora, lo que parece que se está poniendo de moda, es el cultivo por espaldera; hace tiempo puse un escrito en este mismo blog (cultivo del olivo por espaldera); en este caso, la recolección todavía es más rápida, ya que al quedar el árbol con un tamaño de arbusto, pasa un tractor preparado para ello sobre los mismos, y los va recogiendo y almacenando:

Mi amigo Miguel, que también tiene bastantes árboles, aunque no tantos, utiliza una especie de "tenedor" con motor, que sacude las ramas dejando caer el fruto sobre unas telas extendidas en el suelo,
Pero ninguno de estos casos me sirve a mi, ya que tan solo tengo unos 10 árboles, aunque algunos si que tienen un buen tamaño. Así que las únicas herramientas que utilizo son mis manos y por supuesto, unas telas suficientemente grandes como para cubrir el suelo rodeando todo el árbol y ocasionalmente me ayudo con un pequeño rastrillo, que mas bien parece un juguete playero, pero que suele venir muy bien, aunque solo en las ramas muy bajas.
Para poder hacerlo así, hay que llevar bastante cuidado en la época de la poda y evitar que el árbol vaya creciendo hacia arriba, ya que esto dificulta mucho la recolección manual. 
Una vez extendidas las telas, empiezo con la mano a "ordeñar" las ramas a fin de ir dejando caer todas las aceitunas sobre las telas:
Y una vez que se acaba con el árbol, se van vaciando en capazos o cajones,
Cualquier recipiente es válido, siempre que no se caigan por agujeros o fondos estropeados; en mi caso, las cargué en el coche
y las llevé a la almazara, donde se van a convertir en aceite, que recogeré cuando me corresponda:
Es poco lo que puedo contar esta semana, pero es todo lo que he hecho, recoger las olivas.

domingo, 15 de noviembre de 2015

Lo que nos da la naturaleza

Cuando hablamos de productos de la huerta, normalmente siempre pensamos en productos que se cultivan en la misma, y que es el labrador quien lo hace; en realidad esto no es lo correcto, ya que siempre es lo que hace la naturaleza con la ayuda humana, o sin ella.
Por ejemplo, yo debería estar recogiendo habas, y sin embargo, a estas alturas, solo tengo esta: 
y las fresas ya deberían estar secándose, pero están dando ahora más fruto que en plena temporada:
Pero independientemente de lo que se cultive o no, la naturaleza nunca cesa de ofrecernos cosas; algunas, como las setas, no son muy fiables para comer, pero siempre son bonitas:

Aunque si hablamos de cosas comestibles, hay muchas hierbas que habitualmente las rechazamos, como las acelgas silvestres, 
la borraja,
 espárragos, camarroja
y muchas otras más, como los llicsons, la amapola, la verdolaga, etc; todas ellas, hasta hace muy poco, las tenía consideradas como "hierbas no deseadas" (no me gusta la expresión de "malas hierbas"), pero desde que me enteré de algunas de sus propiedades, que las recojo y las consumo; la semana pasada probé un arroz vegano solo con estas hierbas y alubias, sin carne de ningún tipo, y fue realmente una experiencia única de sabor. 

sábado, 7 de noviembre de 2015

Cosas y cosechas de otoño

Una de las características más bonitas del otoño es el color que presenta; el verde de las estaciones anteriores empieza a amarillear y enrojecer, dejando los campos con un aspecto inconfundible; además, por la inclinación del sol, la luz adquiere una tonalidad que combinada con estos colores pinta unos paisajes extraordinariamente bellos.
Es en otoño cuando se recogen las granadas o los caquis,

junto con otras que son más de invierno, como las naranjas o las uvas; en mi caso, solo las granadas son de mi huerto; los caquis de la fotografía son un regalo, pero lo que si que he recogido y he dejado para secar es el maíz:
con lo que este invierno, a ver la pelicula de la tele con las palomitas recién hechas.
Otra cosa también típica del otoño son las setas; limpiando las hierbas, arranqué estas, que no tenían mala pinta, pero como yo pienso que hay algunas que solo pueden comerse una vez, las dejé allí mismo por si acaso.
Y también las habas empiezan ya a florecer; de momento, solo a florecer, porque ya llevan tiempo así  y sigo sin probarlas
y en breve, ya tendré que recoger las aceitunas...