domingo, 23 de octubre de 2016

Por fin, un día otoñal

Se estaba haciendo mucho de rogar, pero finalmente aparecieron unos pocos días que climatológicamente se corresponden con la estación en la que estamos; unos días grises, lluviosos y frescos, unos días en que lo que apetece realmente es quedarse en casa, calentito.
Además de la lluvia, que aunque no ha sido mucha, si que por lo menos en esta ocasión ha sido suficiente y magnífica, se nota la presencia del otoño en que los árboles de hoja caduca como las higueras, ya están perdiendo las suyas:
En cambio, hay algunos árboles que no son de temporada, sino que están todo el año produciendo, como el limonero, que va creciendo en hojas, flores y frutos:
Y otros, como el níspero que florece a finales de otoño y principios del invierno, están mostrándose en todo su esplendor:
Continuando con las tareas del huerto, ya he arrancado las tomateras, pero me supo mal arrancar las plantas de albahaca, ya que estaban preciosas, y con unas flores preciosas:

Además, como síntoma inequívoco del otoño, demostrando que la vida sigue sea cual sea la estación en la que estemos, ya han brotado las plantas de las habas y los guisantes que sembré hace unos días:




domingo, 16 de octubre de 2016

Y me hice mi propio vino!!!

Por fin he conseguido uno de mis caprichos que yo creía que no conseguiría jamás y ha sido poder tener mi propio vino. Cierto que sin tener viñedos ni tener tampoco ni la más remota idea de como conseguirlo, parecía algo así como imposible, pero ... ha sido posible:
Tengo unas cuantas cepas de vid americana, y esta vid generalmente no da fruto, ya que se cultiva para preparar los esquejes como pié para plantar nuevas cepas y posteriormente injertarlas de la variedad deseada, pero a veces salen racimos de una uva negra de grano muy pequeño y ligeramente ácida, que hace que no pueda comer.
Este año vi que había una cantidad importante, así que me propuse el reto de conseguir el vino; hice mi propia "vendimia", recogiendo todo el fruto posible, que en realidad fue menos del que parecía:
No lo pesé, pero así a ojo, serían unos tres quilos, mas o menos, es decir, muy poco. Pero no me desanimé en absoluto, ya había cogido velocidad mi deseo de beber mi propio vino, así que para facilitar la tarea, separé grano por grano para que la madera del racimo no dificultara la tarea:
Aquí tuve la primera dificultad: ¿Cómo prensarla? Al ser poca, podría coger un mortero y comenzar a machacarla para sacar el zumo, pero no lo veía muy claro, así que opté por algo más cómodo, la "turmix". Al triturarlo, los taninos de las semillas se incorporaron al zumo que luego filtré. no llegó a salir un litro de mosto, pero menos es nada:
Era un mosto muy espeso debido a que no lo filtré con tela, sino con un colador muy fino, por lo que se mezcló con restos de pulpa, pero al menos tenía un sabor bastante aceptable. Lo puse en un recipiente, y bien guardado en un sitio fresco y oscuro durante 33 días, ya conseguí el vino de crianza:
Seguía siendo demasiado espeso, por lo que tuve que filtrarlo:
Con este nuevo filtrado, apenas llegó a medio litro de vino, un vino con un toque ligeramente ácido, que realmente me gustó. Me salió un vino mas que aceptable, que desapareció enseguida, pero que me ha permitido cumplir uno de mis caprichos: MI PROPIO VINO.

miércoles, 12 de octubre de 2016

En otoño, cambios

Lo normal en el otoño es que el primer cambio se produzca en el clima; en teoría deberían haber empezado las tormentas, lluvias e incluso algo de  frío; lo malo es que el cambio de estación solo se ha notado en que ha refrescado un poco por las noches, pero nada más. Todo esto lo notan las plantas más que nadie. Es por eso que ahora están las berenjenas en plena producción, e incluso con muchas flores:

Y por si esto no fuera suficiente como para ver que el clima no es el habitual, ahora en pleno otoño, estoy recogiendo espárragos como si fuera plena primavera:
Y si lo que es del verano o incluso de la primavera está ahora en pleno apogeo, lo que es más de otoño como las alcachofas o los cardos ya van avanzando, aunque muy lentamente:
Sin embargo, los nísperos ya empiezan a florecer, y eso si que es normal en esta época, ya que es una flor de invierno:
En cuanto a lo que hay que ir haciendo de trabajo en el campo, ya he recogido todas las calabazas, con la agradable sorpresa de que han sido bastantes;
Y también he sembrado ya los guisantes y las habas:


domingo, 2 de octubre de 2016

Preparando la nueva temporada

Con la llegada del mes de octubre, ya hay que empezar a ir vaciando el sitio ocupado por las plantas veraniegas, e ir preparando el terreno para la nueva temporada; es decir, que ya toca ir arrancando las matas de tomates, calabazas, pimientos, y demás, para poder limpiar el terreno e ir plantando lo del invierno, como pueden ser las habas, los ajos, las patatas, y otras cosas.
Pero una cosa es la teoría y otra la realidad; ¿como puedo arrancar los pimientos si tienen este aspecto?
Tampoco es cuestión al menos por ahora, de arrancar ni los tomates ni mucho menos las berenjenas, las cuales están a pleno rendimiento.
Sin embargo, ya he empezado a recoger las calabazas;
Os recuerdo que para mí han sido la mejor sorpresa que me podía haber llevado este verano, ya que de todas las que sembré no conseguí que germinara ninguna; sin embargo, las dos plantas de melonar que había plantado, eran pie de calabaza injertado de melón; al crecer, salieron algunas ramas de la planta base, y han crecido unas calabazas preciosas. Sin embargo, tampoco están listas para arrancar, puesto que aún quedan algunos melones.
De todas formas, ya he empezado a preparar los sitios donde no tenía nada plantado, como el sitio donde el año pasado planté las patatas; este terreno lo he cubierto en primer lugar con tierra mezclada con cenizas, provenientes de los montones de hierba arrancados para limpiar el terreno. Esta mezcla de tierra, es un abono fabuloso para la tierra:
Una vez abonado el terreno (en otros sitios he repartido abono orgánico), ya solo quedaba labrar la tierra, para que estuviera preparada:


De esta forma, ya he comenzado con la preparación del terreno; en breve comenzaré a plantar y sembrar todo lo de otoño; esperemos que vaya igual o mejor que me ha ido el verano.