domingo, 27 de noviembre de 2016

Por fin, lluvia, frío y el tiempo que toca

Por fin parece que el otoño realmente ha llegado; esta semana que ha pasado hemos tenido lluvia de verdad, sin hacer daño, pero mojando mucho el suelo, calando hondo, ... como decimos en mi tierra, "fent molta saó".
Los árboles, como este granado, ya tienen el color y el aspecto típico que deben tener:


Los colores amarillos y rojizos son los más típicos y bonitos del otoño, pero no solo la caída de la hoja es lo que se hace de notar en esta época; hay algunos árboles cuyo aspecto ahora es como si fuera plena primavera, totalmente llenos de flor, como los nísperos:


Estas flores, que tal vez no sean tan bonitas como otras, se convertirán (espero) la próxima primavera en hermosos, grandes y amarillos nísperos, si no falla nada:


Estas lluvias, han hecho salir también hierbas, muchas hierbas, pero entre estas hierbas, también me han salido otras plantas: por lo visto se quedaron algunas patatas por recoger el año pasado, y ahora han germinado:


Aprovecharemos pues el regalo de la naturaleza, que no desperdicia nunca nada, y las dejaremos crecer; dentro de poco sembraré las que corresponden a este año, con lo cual tendré cuatro o cinco plantas más de las previstas. 
Una duda que me quedaba (siempre aprendiendo, como debe ser), es si los guisantes tenían que encañarse o no; por favor, si es una planta trepadora... De momento, ya les he puesto unas varas para que vayan trepando hacia arriba, y cuando esté algo seco el terreno, lo pondré de mejor forma:


domingo, 20 de noviembre de 2016

Es otoño, pero no lo parece

Solo viendo los árboles, que ya tienen el color ocre característico de esta época, o ya han perdido totalmente sus hojas, es cuando nos damos cuenta que estamos en el otoño; lo habitual es que salgan días nublados, lluviosos, y de vez en cuando, algún día con sol, pero ese sol tan típico de esta estación; sin embargo, la lluvia brilla por su ausencia, ya que estamos en una sequía tan absoluta, que los meteorólogos, en vez de medirla en litros por metro cuadrado van a medirla en gotas por metro cuadrado, y el sol luce como si estuvieramos en abril.
De esta forma, los cultivos de esta temporada, van ligeramente atrasados, mientras que algunos veraniegos, todavía siguen dando sus frutos. 
En las fotografías que pongo, se puede observar que las habas y los guisantes que sembré, pese a que han salido y van creciendo poco a poco, no tienen el tamaño y el aspecto que deberían tener, debido a que no han tenido todavía nada de frío:
Y en cambio, cuando he preparado el terreno para continuar con el ciclo otoñal del huerto, no he tenido más remedio que dejar todavía los pimientos y las berenjenas:
Ahí quedan, como un islote de verde en la tierra. Al fondo, se puede apreciar un pequeño cercado que he preparado, porque he visto que hay una gran cantidad de conejos por el campo, y como ya he sembrado allí las hortalizas que según el tópico más les gustan (zanahorias, remolachas), y otras hierbas que los humanos también nos gusta comer (canónigos y espinacas). De esta forma, intentaré aislarlo para que coman la hierba que me molesta y me respeten la que cultivo.
Hablando de conejos, estoy recopilando unas fotografías de los bichos que pueblan el huerto; los que seguís habitualmente este blog, ya habréis visto caracoles, saltamontes, mantis, arañas y otros bichos. Hoy pongo dos que no se ven de normal, porque viven bajo tierra, como la lombriz y el ciempiés:

:Los he podido fotografiar porque me han salido al remover la tierra para coger los boniatos; este ha sido el cultivo "extra" que suelo hacer todos los años, pero no he quedado muy satisfecho con el mismo, pero ha sido porque no lo pensé bien; los planté en una zona que la tierra se compacta muy facilmente, y además, estaba lleno de grama, por lo que aparte que se han quedad muy pequeños, me están costando mucho de sacar:
Pero al menos, los probaré; no tienen mala pinta. La próxima vez, llevaré más cuidado y los plantaré en otra zona, que la tierra sea menos compacta.

viernes, 11 de noviembre de 2016

Pocas aceitunas

Este año, no se puede decir que sea un buen año para las aceitunas; desde luego para mí no. Parece ser que no soy el único por la zona que piensa igual, ya que la mayoría de la gente con la que hablo no está contenta con la cantidad que va a recoger. Si yo calculo que voy a recoger una tercera parte de lo que recogí el año pasado, hay quien me cuenta que no va a llegar ni a la quinta parte. 
Si a esto le añadimos que este año han madurado demasiado pronto (a mediados de octubre ya tenía la mayor parte de la variedad manzanilla totalmente madura), lo que sucede es que se cae al suelo y encima de poca, se pierde.
 Y es que el clima no ha ayudado en absoluto a la evolución normal del cultivo de las aceitunas: un calor bastante elevado y además duradero, ha provocado esta maduración tan temprana; además, normalmente, las almáceras abren a principios de noviembre, lo que hace que las aceitunas que caen al suelo se pierden todas.
Por si el tiempo no hubiera sido suficientemente malo, para una vez que se le ocurre llover (ya era hora!), esta lluvia ha terminado de tirar al suelo las pocas que aún quedaban en el árbol.
Pero esta lluvia ha sido muy bien recibida; además han sido tres o cuatro días en los que ha llovido de forma continuada y poco a poco, con lo que ha calado en el suelo. Como curiosidad, han aparecido algunas setas:
Por lo menos, esto si que es habitual en esta época del año. 
Aunque, todavía queda algo de la campaña de verano, ya que aún cojo alguna que otra berenjena o pimientos: