No, no se trata de la ciudad de los nazaríes, sino de esta extraordinaria fruta; estamos acercándonos al otoño, y es ahora cuando comienzan a estar a punto las frutas que a mi particularmente más me gustan; se trata de la uva, los higos, los caquis, y sobre todo, las granadas. Son unas frutas muy dulces y refrescantes y contienen agua y mucha fibra; no tienen calorías y muy pocos hidratos de carbono, por lo que son ideales para las dietas de adelgazamiento. Tiene propiedades beneficiosas para combatir el colesterol, el ácido úrico, la hipertensión, problemas de estreñimiento, anemias, entre muchas otras cosas. Es muy rica en vitamina C, potasio, calcio y magnesio, antioxidantes, taninos, etc.
Pero para mi, esto no es lo mejor; simplemente el placer de desgranarla, para luego comerla sola, mezclada con un poco de vino tinto, o mezclada con yogour es algo extraordinario. En mi huerto tengo un granado, que me proporciona suficientes como para disfrutar durante una temporada.
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