domingo, 17 de enero de 2016

Ni invierno, ni primavera, estamos en priminvierno

Por fin parecía que había llegado el invierno cuando ya llevamos más de un mes oficialmente en esta estación, pero ha sido un espejismo: dos gotas mal caídas, tres días que han bajado las temperaturas, aunque eso sí, han bajado de verdad: a 1 grado estaba ayer sábado cuando llegué al huerto, y se acabó. Hoy domingo, aunque sigue haciendo frío, parece que ya se ha acabado, porque el solecito calienta bastante. Esto produce combinaciones de flores y frutos poco habituales:
Almendros en flor y naranjas listas para recoger. Si que hay que observar un pequeño detalle, que como no lo sabía cierto, pese a observarlo no lo había comentado nunca aquí: los almendros "bordes", o amargos son los que florecen primero y algunos están ya como estos de la fotografía; en cambio los "dulces" o buenos, son los que tardan un poco más. Espero que tarden algo más, porque como les pille una helada de las típicas de finales de Enero y principios de Febrero, los deja secos.
No solo los almendros están en peligro; otra fruta que también corre peligro de helarse, pese a que sigue su ciclo normal, es el níspero:
A veces es la propia naturaleza quien parece que hace tonterias, ya que el ciclo de floración del níspero es en pleno invierno, para a mediados de la primavera está totalmente listos, con lo que el riesgo de que se hielen es muy fuerte, y a mi me ha pasado algunas veces ya desde que controlo el huerto, 
El invierno es la estación ideal para la poda de los árboles, y en ello estoy; no hay más que ver el ciruelo como estaba antes, y como se ha quedado después:

Otra tarea típica del invierno es sembrar las patatas; yo sigo una especie de ritual: primero, después de preparar a conciencia el terreno, para que quede la tierra lo más suelta posible, hago unas pequeñas zanjas en las que voy dejando las patata que voy a sembrar, separadas por unos 60/70 cms:

Cuando ya he dejado las patatas, las cubro totalmente de forma que queden a unos 15 cms de profundidad:
Finalmente, estos surcos los recubro con ceniza, pongo las gomas para el riego, y a regarlas:
Esto de las cenizas es algo que he aprendido hace poco; lo apliqué con los ajos, y a la vista del resultado, lo continúo haciendo ahora con las patatas. 
Vamos a ver si ahora cambia un poco el tiempo y empieza a hacer algo de frio, porque empieza a ser muy necesario; de hecho, las habas este año apenas las voy a probar, porque no les ha ayudado nada el clima.

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