Si la semana pasada indicaba que ya empezaban los frutos, esta semana aumenta la cantidad (y la calidad) de los mismos; al color amarillo de los nísperos, se añade ya el rojo oscuro de los ciruelos:
Esto en cuanto a la recolección habitual, porque ya he visto que los ajos están en condiciones de comenzar a recogerlos la próxima semana, al igual que las patatas; además he aprovechado que tenía que limpiar la zona donde tenia las cebollas, y las he recogido; no se que ha pasado, pero se han quedado muy pequeñas, pero al menos están buenas:
Es curioso, cuando pensamos en flores, siempre nos viene a la cabeza su aroma, pero la del ajo, todo y lo bonita que es, no hay que olvidar que su olor es el de la planta que le da el nombre:
En cambio, la flor de la fresa no es tan llamativa, es mucho más humilde, pero su fruto es mucho más dulce:
Y de la flor al fruto; las tomateras ya empiezan a mostrar sus frutos también:
Y es que ahora que he limpiado los alrededores del tomatar, se ve más bonito, y con más fuerza:
Es con los tomates donde tengo ahora enfocado prácticamente todo el trabajo que estoy haciendo ahora, ya que hay que mantener limpio el suelo de hierbajos, desojarlo continuamente para que crezca hacia arriba y no hacia los lados, y por supuesto, ir atándolo a la caña para que siga en recto. Esto no quita que también continuo haciendo "huerting", ya que lo que me ha pasado esta primavera con las hierbas no me había pasado nunca; por lo menos ya se va viendo el resultado, aunque no lo rápido que a mi me gustaría. En cualquier caso, la próxima semana tengo previsto recoger las patatas y los ajos, con lo que limpiaré un buen trozo de terreno, para aprovecharlo en otras plantas.
No quiero acabar esta semana sin poner una fotografía curiosa que hice en un mercado de Valencia:
Muy artística la calabaza, ¿no?
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